Hospedarte en un hotel en Zacatecas es mucho más que encontrar un lugar cómodo para dormir; es tener la oportunidad de despertar rodeado de historia, cultura y una arquitectura que parece salida de un libro de arte. Pero ¿qué puedes hacer una vez que dejas tu habitación y sales a explorar? Zacatecas es una ciudad que se vive a pie, con los sentidos despiertos y el corazón dispuesto a dejarse sorprender. Si estás planeando una escapada de fin de semana, aquí te damos varias ideas de lo que puedes hacer cerca de tu hotel para aprovechar cada minuto de tu visita.
Visita la majestuosa Catedral Basílica
Si tu hotel en Zacatecas está ubicado en el centro histórico, seguramente estarás a solo unos pasos de uno de los íconos más imponentes del estado: la Catedral Basílica de Zacatecas. Su fachada de cantera rosa es un prodigio del arte barroco, con tallas tan detalladas que podrías pasar horas admirando cada rincón.
Por dentro, la Catedral sorprende con un altar moderno de mármol blanco que contrasta con la solemnidad del edificio. Es un excelente punto de partida para comenzar tu recorrido por la ciudad, y una parada obligada para quienes aman la arquitectura religiosa o simplemente desean un momento de contemplación.
Pasea por el Teleférico y el Cerro de la Bufa
Desde tu hotel puedes caminar hacia la estación del teleférico, una de las atracciones más emocionantes de la ciudad. El trayecto te lleva desde el Cerro del Grillo hasta el Cerro de la Bufa y te regala una vista panorámica de Zacatecas que difícilmente olvidarás.
Una vez en el Cerro de la Bufa, puedes visitar el Museo Toma de Zacatecas, el Santuario de la Virgen del Patrocinio y el mirador, desde donde tendrás una de las mejores vistas de la ciudad. Es un plan perfecto para la mañana del sábado, combinando historia, naturaleza y fotografía en un solo recorrido.
Explora museos llenos de arte y cultura
Zacatecas es una ciudad de museos, y la mayoría están a una distancia caminable desde cualquier hotel céntrico. El Museo Pedro Coronel es uno de los más destacados, albergando una colección internacional de arte moderno con obras de Picasso, Miró, Dalí y Chagall, entre otros. El edificio que lo resguarda, una antigua escuela jesuita, ya vale por sí mismo la visita.
Otra joya es el Museo Rafael Coronel, ubicado en el exconvento de San Francisco. Este lugar alberga una de las colecciones de máscaras más grandes del mundo y tiene jardines que invitan a recorrerlos con calma.
También puedes considerar el Museo Zacatecano, dedicado a la historia y cultura local, o el Museo Manuel Felguérez, ideal para quienes disfrutan del arte abstracto y contemporáneo.
Disfruta de la gastronomía local
Uno de los mayores placeres de alojarte en un hotel en Zacatecas es la posibilidad de descubrir sabores únicos apenas cruzando la puerta. Cerca de tu hospedaje encontrarás una gran variedad de restaurantes, fondas, cafés y mercados que ofrecen desde comida tradicional hasta propuestas más modernas.
No puedes irte sin probar las enchiladas zacatecanas, el asado de boda o las gorditas rellenas de guisos típicos. Para los más dulceros, el camote enmielado, las cocadas y las cajetas de membrillo son una delicia que te conecta con las raíces culinarias del estado.
Muchos hoteles también ofrecen desayunos con platillos regionales, así que no dudes en comenzar tu día con un café de olla y pan dulce local mientras observas la ciudad desde una terraza.
Tarde de compras y arte local
Si buscas llevarte un recuerdo auténtico, Zacatecas es un excelente lugar para comprar artesanía mexicana. Cerca de tu hotel puedes encontrar tiendas especializadas en textiles bordados, piezas de plata trabajadas a mano, cerámica, talabartería y figuras religiosas hechas por artistas locales.
El Mercado González Ortega, por ejemplo, es un edificio emblemático lleno de locales con productos únicos, además de restaurantes y cafeterías. También puedes visitar galerías de arte y talleres donde se elaboran objetos tradicionales con un toque contemporáneo.
La experiencia de comprar en Zacatecas va más allá de lo comercial: es una forma de apoyar a los artesanos y llevarte un pedacito de la cultura local contigo.
Vive la vida nocturna zacatecana
Después de un día lleno de historia y exploración, la ciudad aún tiene mucho por ofrecer. Desde tu hotel puedes llegar fácilmente a bares con música en vivo, cafés literarios, terrazas con cocteles artesanales y callejones con eventos culturales.
Durante los fines de semana, algunas plazas del centro cobran vida con actividades al aire libre, teatro callejero o conciertos gratuitos. También puedes unirte a un recorrido de leyendas, donde guías caracterizados como personajes históricos te llevan por callejones y te cuentan los relatos más misteriosos y divertidos de la ciudad.
Y si prefieres algo más tranquilo, muchos hoteles en Zacatecas ofrecen terrazas con vista al centro histórico, ideales para disfrutar de una bebida mientras contemplas el cielo estrellado.
Recorre templos y callejones con historia
Zacatecas es una ciudad que se camina, y cada paso revela un nuevo rincón lleno de encanto. Además de la Catedral, hay otros templos con gran valor histórico y artístico, como el Templo de Santo Domingo, la Capilla de Nápoles o el Templo de San Agustín.
Entre cada visita, puedes perderte por callejones emblemáticos como el del Santero, el del Mono Prieto o el callejón del Tránsito. Algunos de ellos están decorados con murales, escaleras coloridas y leyendas que forman parte de la identidad zacatecana.
Caminar por estos callejones en pareja, en grupo o incluso en solitario es una de las formas más auténticas de sentir la esencia de la ciudad.
Relájate en espacios con historia y tranquilidad
Después de tanto caminar, también es válido tomarte un momento para descansar. Algunos hoteles en Zacatecas cuentan con patios interiores llenos de vegetación, fuentes, sillones y hamacas, donde puedes leer un libro, tomar una bebida o simplemente relajarte.
Si tu hotel tiene spa, aprovecha para agendar un masaje o un tratamiento corporal. Algunos alojamientos incluso ofrecen experiencias de bienestar inspiradas en ingredientes tradicionales como la sábila, la miel o la piedra volcánica.
Estas pausas también forman parte de un buen viaje: te ayudan a reconectar contigo, procesar lo vivido y recargar energía para seguir descubriendo.
Zacatecas es una ciudad que se disfruta sin prisa. Hospedarte en su centro te permite vivirla desde adentro, con acceso inmediato a sus joyas históricas, su gastronomía, su arte y su gente. Y si eliges un hotel en Zacatecas bien ubicado, todo lo que necesitas para tener un fin de semana perfecto estará a solo unos pasos de ti. Porque en esta ciudad, cada esquina tiene algo que contar y cada plan se convierte en un recuerdo imborrable.
Pies para que los quiero 